Esta es la mamá-gata de la que os hablé hace unos días. Estaba en la calle y ahora reside en una casa (con una perra antigatos) mientras se recupera de la esterilización, pero luego es imposible que se la queden y tendrá que volver a la calle. Parece un abandono: busca siempre el contacto humano y desde que tiene un techo bajo su cabeza está feliz de la vida y lo demuestra poniéndose patas arriba esperando que le acaricien la barrigota. Está prácticamente recuperada de la esterilización y en unos días vuelve a la calle si nadie lo remedia con el consiguiente peligro para su vida. Con esa carita tan preciosa alguien la tiene que querer.
De paso os recuerdo que tres de sus niños también tienen cogido número para la vez de encontrar hogar. Nadie llama preguntando por ellos… y en la casa es peligroso que sigan por la perra comegatos de la que hablo.
Contacto: Rosa Beci 676 679 641