Ringo es alegre, juguetón y siempre va detrás de las personas del albergue, no quiere perder de vista a quienes lo salvaron de su vida de paria por los caminos, calles y plazas donde era recibido a escobazos si tenía la osadía de sentarse ante una puerta con la esperanza de ablandar el corazón de la propietaria y obtener algo de comida. Ringo nunca fue querido, ni interesó jamás a nadie, sólo era un perro molesto. La caridad de las personas se pone a prueba cuando un animal abandonado circula hambriento por las calles, es mejor espantarlo, que desaparezca de la vista y quedarse tranquilo, que ponerle un plato de comida, un poco de agua, o articular una palabra compasiva que lo consuele. Ringo nunca recibió más que desprecios, chillidos, voces y palos. Nada de eso ha dejado huella en su corazón, es demasiado noble para eso. Sigue siendo el compañero buenazo que espera, con infinita paciencia, la aparición en su triste vida de "su amo". Lleno de esperanza, confiando aún en el ser humano que tanto daño le ha causado. Está en Ubeda, pero se envía a toda España.
Contacto: hhmercedes2001@mixmail.com 660 289 716